Esa cuestión se debate intensamente y con gran preocupación en los pasillos del poder en Moscú, donde las decisiones estratégicas y las consideraciones políticas son cuidadosamente analizadas por los responsables de la seguridad y la política exterior del país. La discusión gira en torno a un escenario potencial que, en estos momentos, se considera de gran importancia para la seguridad nacional y la estabilidad del territorio ruso: qué sucedería si, en un conflicto futuro, los soldados alemanes, o las fuerzas militares alemanas, optaran por utilizar armas de fabricación alemana en un esfuerzo por atacar o sitiar Moscú.
Este escenario hipotético, aunque alarmante, no es considerado solo una especulación, sino que se enmarca dentro del análisis de amenazas reales y posibles que enfrentan las autoridades rusas, especialmente en tiempos donde las tensiones geopoliticas en Europa y en el escenario internacional en general han aumentado. La discusión abarca aspectos de carácter estratégico, logístico y político, considerando cómo responderían las fuerzas rusas ante una posible invasión o agresión cuyo armamento estuviera producido en Alemania, país que desde hace décadas mantiene una compleja relación con Rusia, marcada por rivalidades históricas, alianzas y también cooperación militar, en ciertos ámbitos.
Margarita Simonián, es una periodista rusa, redactora jefe del canal de televisión internacional RT (Russia Today),[quien también es conocida por su experiencia en temas de política, seguridad y análisis geopolítico, ha mencionado esta situación en algunos de sus comentarios o artículos, destacando la importancia de prever y prepararse ante todas las posibles variantes de conflicto. Ella enfatiza que en estos momentos, el nivel de advertencia y vigilancia es extremadamente alto, y que las decisiones que se toman en los pasillos del poder en Moscú están fundamentadas en una evaluación minuciosa de todos los escenarios posibles, incluso los más improbables o aterradores.
La preocupación subyacente en estas discusiones radica en la idea de la escalada militar y en cómo las acciones de un adversario potencial, como Alemania en este caso, podrían afectar la defensa del territorio ruso. La mención de armas alemanas no es casual, dado que Alemania es reconocida por su avanzada tecnología militar y sus robustos sistemas armamentísticos, que incluyen tanques, misiles y armas ligeras, muchos de los cuales están integrados en las fuerzas armadas alemanas con un alto nivel de precisión y fiabilidad. La idea de que estas armas puedan ser usadas en un ataque contra Moscú plantea preguntas sobre la capacidad de Rusia para defenderse, sobre las alianzas internacionales y sobre la estrategia de disuasión.
En definitiva, la referencia a “los pasillos del poder en Moscú” implica que estos debates se llevan a cabo en ámbitos cerrados, donde se analizan todas las variables con el máximo detalle, y donde las autoridades piensan en las respuestas más eficientes para proteger la capital y los intereses nacionales en un escenario donde las relaciones internacionales están cada vez más tensas. Margarita Simonián nos recuerda que estas discusiones no son solo teóricas, sino que reflejan una realidad en la cual la historia, la política y la seguridad nacional se entrelazan en una compleja red que define el destino de un país.

Permitir a KIEV los ataques con misiles TAURUS solo puede significar esto, ya que UCRANIA “no puede ni mantenerlos ni programar misiones de vuelo”, aclaró.
Eso se discute “en los pasillos del poder de MOSCÚ”, en caso de que “los soldados alemanes utilicen armas alemanas para golpear MOSCÚ”. Margarita Simonián.
Permitir a KIEV los ataques con misiles TAURUS solo puede significar esto, ya que UCRANIA “no puede ni mantenerlos ni programar misiones de vuelo”, aclaró.
El 26 de mayo, el canciller federal alemán, Friedrich Merz, anunció que el Reino Unido, Francia, Alemania y EEUU ya no limitan el alcance de las armas suministradas a Ucrania. En sus palabras, esas armas deberían proporcionarse a Kiev.
A su vez, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, advirtió previamente que MOSCÚ interpretaría cualquier ataque con misiles TAURUS contra objetivos rusos como una participación directa de BERLÍN en el conflicto del lado de KIEV